Cimiento de Letras
Una de las glorias deportivas de los últimos tiempos, Fernando Valenzuela, dejó de existir físicamente, pero su nombre y sus hazañas en el beisbol estarán ahí por siempre, descanse en paz el llamado “Toro de Etchohuaquila”.
Los Dodgers, equipo donde escribió su historia beisbolera, le rendirá un homenaje en estos días cuando inicie la llamada “Serie Mundial”, su nombre y su camiseta número 34 tienen ya un lugar en los anales del beisbol.
Valenzuela es en el beisbol, lo que Hugo Sánchez es en el fútbol y lo que Julio César Chávez es en el boxeo y lo que “Checo” Pérez es en el automovilismo, deportistas que han puesto en su oportunidad, el nombre de México muy en alto.
Desde luego hay para fortuna nuestra muchos valores en diferentes ramas del deporte, me faltaría espacio para mencionarlos a todos, por ahora el comentario está dedicado al enorme pitcher Fernando Valenzuela.
En la época en que Fernando brilló intensamente, el llamado rey de los deportes no pasaba por su mejor momento y la figura de nuestro compatriota, fue factor para volver a llenar los estadios donde él se presentaba como pitcher abridor. Así de grande era su figura.
