Maullidos Urbanos


Riesgos de medicina contra calvicie
Si bien la calvicie, tanto en hombres como en mujeres es una condición que no solamente afecta su aspecto físico, también incide en su autoestima. Por ello, recientemente se ha hecho popular el uso de la medicina llamada Minoxidil para combatir la pérdida de cabello, aunque en algunos casos puede generar resultados positivos, también se debe precisar la existencia de diversas situaciones que pueden afectar la salud de quienes la consumen.
Inicialmente se debe definir que esta situación, también conocida como alopecia, afecta a millones de personas en todo el mundo; las causas que la origina son diversas siendo la más común la alopecia androgenética o calvicie hereditaria, condición enmarcada por el debilitamiento y caída progresiva del cabello, lo cual genera un significativo impacto negativo en la autoapreciación individual y calidad de vida de quienes la padecen.
Por ello el Minoxidil, medicina utilizada inicialmente para tratar la presión alta, es un vasodilatador, es decir ensancha los vasos sanguíneos y se cree que por este efecto aumenta el flujo sanguíneo en el cuero cabelludo, lo que nutre los folículos pilosos y el oxígeno necesario para crecer y fortalecerlos. Sin embargo, se advierte que esta no es la cura definitiva para la calvicie, incluso, provoca una serie de riesgos personales que deben considerarse.
De acuerdo con la estadounidense Biblioteca Nacional de Medicina, la NIH por sus siglas en inglés, el Minoxidil es más eficaz en menores de 40 años de edad cuya pérdida del cabello es reciente aunque no tiene efecto sobre las entradas cada vez más pronunciadas y la mayoría del cabello nuevo se pierde pocos meses después de suspenderse el uso de la medicina. Además, los resultados varían considerablemente entre diferentes personas.
Entre las secuelas negativas se enumeran la picazón, resequedad, despellejamiento, descamación, irritación y ardor del cuero cabelludo. Incluso, en caso de presentar entre otros síntomas como aumento de peso, inflamación de cara, tobillos, manos o abdomen; dificultad para respirar en especial al acostarse, frecuencia cardíaca más rápida que lo usual, dolor en el pecho y mareos, resulta necesario acudir a consulta médica de inmediato.
Aunque para los hombres les resulta más fácil aceptar perder el cabello con el paso del tiempo hasta quedar totalmente calvos, incluso a las mujeres parecerles sexys, para ellas es más difícil y por ello recurren al uso de pelucas. En conclusión, es mejor aceptar que resulta inevitable la alopecia, que intentar recurrir a medicinas que no garantizan resultados positivos y definitivos y, por el contrario, podrían causarles mayores problemas de salud.